¡Qué en Navidad, la noche sea de paz y no de deudas!

Te comparto cuatro regalos que no pasarán factura a tu paz mental ni te dejarán deudas pasando las fechas decembrinas. Antes que nada, mi intención es resaltar el significado de regalos no materiales en medio de la presión social para demostrar tu amor o cariño a tus seres queridos con los regalos físicos (que al final pueden significar deudas y problemas económicos en los meses posteriores al tarjetazo). No me mal interpreten, me encantan los regalos, pero no quisiera que alguien por demostrarme que me quiere tenga que elegir entre su tranquilidad financiera y el cariño de sus seres queridos! 

¿Recuerdas ese resentimiento de haber gastado en un regalo para alguien y esa misma persona te da algo de menor costo monetario? Entendamos que económicamente todos tenemos responsabilidades específicas, algunos pagan colegiaturas, otros adquirieron una deuda como una casa o un coche necesarios para la seguridad de su familia y transportarse, respectivamente; algunos otros tendrán un bebé, lamentablemente otros luchan con una enfermedad ¡o simplemente los ingresos económicos no son similares incluso en la misma familia o grupo de amistades! Por eso te invito a que nos enfoquemos en lo que recibimos y damos no sólo en estas fiestas, sino en cualquier día del año y vale como el oro!

1. Brindar tu atención: ya sea a tus padres, a tus hijos, amigos, colegas; escuchar activamente manda al otro el mensaje de que son valiosos para ti, que lo que dicen importa y fortalece la conexión emocional entre todos etc. Llamadas, mensajes, visitas, paseos, etc… Escuchar al otro no sólo se refiere al apoyo en los problemas, sino en apoyar metas, creer en el otro, validarlo, “echar porras”, lo que piensa o quiere expresar.

2. Acompañar: la compañía es un acto de bondad, implica tiempo, espacio y calor humano. Nos divertimos, nos reímos, o como como pilares en los vientos de adversidad para alguien más. El acompañamiento es como un abrazo emocional, cálido y fuerte.

3. Palabras de afecto y acciones de congruencia: Cuando prometes algo y lo cumples, cuando validas a tu prójimo con comentarios positivos (constructivos) y cuando tus acciones hablan más que tus palabras regalas seguridad, compromiso y amor a tu hijo, a tu pareja, a quienes sean los que te rodean. A través de la congruencia, lo que de verdad haces es que tus seres queridos cuentan con alguien en quien pueden confiar ¡eso no lo hace ni el regalo más carísimo del centro comercial!

4. Acordarte de alguien y contactarlo: básicamente le haces saber que esa persona vive en ti, trasciende el tiempo y las fronteras; puede ser un amigo a larga distancia, un familiar en otro estado o país, o la amistad con el que poco coincides para reunirse por las actividades de ambos. ¿Alguna vez te has encontrado en la calle a un amigo que no veías hace mucho y te ha dado un gusto verlo de nuevo? Algo similar se siente cuando te mandan un mensaje para saludarte y saber ti ¡o te invitan un paseo para ponerse al tanto!

¿Uno extra? 

Este es un auto-regalo: TRANQUILIDAD MENTAL. ¿Cómo? Realiza tu presupuesto y triunfa ante la presión social, en medio de la lluvia de publicidad, las redes sociales y demás. Cumplamos con nuestras prioridades y después nos damos un lujito. La paz mental es el mejor regalo que nos podemos dar para recibir el próximo año.

Recuerda ¡los regalos que llegan al corazón, no te cuestan un centavo y mucho menos tu paz mental!

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