Lo que se dice como broma, nos está dañando más de lo que imaginas

Seguro has escuchado frases similares a: ando depre, es hiperactivo, eres bien bipolar o similares. Por ejemplo: alguien hace una observación sobre una persona que tiene limpio su departamento, ordenado y muy cuidado a detalle, comentando cosas como que posiblemente la persona sea “obsesiva compulsiva”; en primer lugar, ojalá todos viviéramos en la limpieza, y en segundo lugar, posiblemente tener un rasgo que se relaciona con un trastorno mental, no te hace tener el trastorno mental. 

Supongo que si hablamos de esta manera, tan a la ligera y carente de un juicio informado, es porque se ha diluido el significado real del trastorno depresivo, del trastorno bipolar, del trastorno obsesivo compulsivo, del que sea. En la televisión lo he visto, por excelencia es un medio de información o desinformación masiva. Por lo que es necesario reforzar el conocimiento sobre la definición de enfermedad mental.

Una enfermedad mental es una condición o un padecimiento que afecta a la persona, en diversas áreas de su desarrollo humano. Me voy a regresar para enfatizar la palabra: ENFERMEDAD, cuando hablamos de depresión, trastorno de ansiedad, anorexia, trastorno de personalidad, hablamos de una enfermedad. ¿Que nos dice esto? Que la enfermedad puede suceder a quien sea, donde sea, de la edad, condición social, educación que sea, y algo que se debe entender es que tener una enfermedad es involuntario. Tener la casa limpia, gusto por el orden, no es estar enfermo, es una preferencia, que por cierto, tiene muchos beneficios, pero ese no es el punto ahora. 

Lo que caracteriza una enfermedad mental es el cambio o cambios en su conducta, en su proceso mental, y/o estado de ánimo. En otras palabras, son sintomatología de carácter físico, psicológico y emocional, y puede intensificarse dependiendo del entorno en el que se desenvuelva, por ejemplo, una persona con trastorno depresivo, puede llegar a presentar síntomas más agudos si no cuenta con redes de apoyo (relaciones de amor y cuidado), vive violencia intrafamiliar y es adicta a alguna droga; el aislamiento social, la violencia familiar y la adicción son factores de riesgo que pueden desencadenar un trastorno mental o intensificarlo. 

Lo voy a representar de manera general, seccionada y muy breve. Continuando con el ejemplo del trastorno de depresión, algunos de sus síntomas y/o señales son: 

Pensamiento:

Le es difícil concentrarse, pensar y/o tomar decisiones. Existe un pensamiento constante sobre morir, o la muerte y suicidio. 

Emociones: 

La persona reporta sentirse vacía, sin motivación, sentimientos de culpa, sin esperanza durante todo el día, todos los días. 

Conducta: 

Se aíslan, cambios en el apetito, insomnio o al contrario, dormir mucho. 

Estos síntomas y signos (señales), pueden llegar a ocurrirle, de manera aislada, a una persona que no tenga el trastorno, o sea, un día yo me puedo sentir triste y se me quitó el apetito, pero a la mañana siguiente ese sentimiento desapareció, quizás un día piense qué sentido tiene mi vida, pero me ayude a reflexionar y ser optimista en mi futuro y me haga sentir motivada. Quizás una noche no pude dormir, algo me preocupó, pero sólo me ocurrió una vez, el mes pasado. Por eso es importante hacer la diferencia entre un evento ocasional, a unas conductas que suceden simultáneamente, imposibilitan a la persona para realizar sus funciones cotidianas en su entorno social, laboral, personal, pues son señales de alerta. 

Obsérvese entonces que no es lo mismo andar triste, que andar “depre”. Cuando minimizamos los trastornos, invalidamos o descalificamos los síntomas de las personas, esto puede dar la impresión a un sujeto que padece una enfermedad mental que lo que le ocurre no es para tanto. Imagina qué obstáculos se refuerzan: el estigma, la ignorancia, la vergüenza y la burla. Cuando nos expresamos de esta forma, restamos su gran importancia por lo que quien lo sufre se enfrenta limitantes para su adecuada atención, y si es que se permite comunicar lo que le sucede y pedir ayuda.

Tener sentido del humor es genial, pero tomemos en serio lo que es serio y seamos amables con nuestros seres queridos, con nuestros colegas, con nuestros conocidos, siendo conscientes e informándonos sobre la enfermedad mental, así como la solidaridad que tenemos cuando alguien cercano tiene cáncer o diabetes. Espero que con tu interés y comprensión logremos una sociedad compasiva y comprensiva, capaz de apoyar a cualquiera que sea parte de ella. 

A continuación te dejaré unas direcciones URL para que visites y te informes más a detalle.

https://www.psychiatry.org/patients-families/what-is-mental-illness

https://www.apa.org/centrodeapoyo/cambie

https://www.apa.org/topics/mental-health/support-serious-mental-illness

https://medlineplus.gov/spanish/mentalhealth.html

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